En una parcela en pendiente de unos 10.000 m2 se ubica esta vivienda unifamiliar como segunda residencia para periodos vacacionales y fines de semana. La parcela tiene una densidad brutal de vegetación, sobre todo robles, y la propiedad tiene gran afición por el estudio de los árboles. En este marco, se plantean cuatro tipos de bosque con sus transiciones, que se adaptarán a las diferentes condiciones de humedad, topografía y orientación de la parcela. Cada bosque tendrá su apogeo en una estación del año, y la vivienda se relacionará desde el centro de la parcela con todos ellos, buscando la manera óptima en cada caso.